Hoy en la seccion Famille del diario La Presse, encontre un informe muy interesante sobre el choque cultural que sienten canadienses que regresan a vivir a su pais despues de un largo tiempo fuera.
Por razones obvias, el testimonio que mas llamo mi atencion fue el de la señora Anic Coiteux, residente de Repentigny y esposa de un compatriota mio, quien regreso a Quebec proveniente de Lima. Cuenta ella la gran diferencia que existe entre el modo de vida peruano (que creo es similar en la mayoria de los paises latinoamericanos) y el canadiense. En Lima ella fue testigo del papel que juega la familia en la vida social. A diferencia de los canadienses, nosotros somos mas calidos, no vivimos aislados, el circulo familiar es mas fuerte y el apoyo mayor aun. Comenta como anecdota que alla no se preguntaban que hacer con sus hijos cuando debian salir : "los llevabamos con nosotros", dice.
He aqui uno de los factores fundamentales del proceso de integracion. Los latinoamericanos venimos de nacer, crecer y desarrollarnos en una sociedad en donde la familia nos sostiene. Incluso despues de "dejar el nido", seguimos estrechamente relacionados a nuestra familia y no hablo solo de padre y madre, sino tambien tios, abuelos, primos, sobrinos y hasta la "familia de cariño" (amigos de larga data y que llegan a formar parte de la familia).
Cuando dejamos eso atras y llegamos a Canada nos damos con la sorpresa que el nucleo familiar esta compuesto por papa, mama y 1 hijo (el promedio canadiense). Por supuesto, existen abuelos, tios, primos pero no existe mucha cercania entre ellos. Cada uno esta ocupado de su propia familia. Ya no tenemos con quien dejar a nuestros hijos si debemos salir a algun lado, alguien de confianza y que no nos cobre :-). Es aun mas dificil en invierno, pues la gente hiberna.
Muchos inmigrantes toman esta diferencia de una manera tranquila, mientras que otros se sienten abatidos, se dejan arrastrar por el Sindrome del inmigrante y finalmente terminan regresando sin haberse dado una oportunidad de triunfar aqui.
Muy cierto es que nadie puede reemplazar a nuestra familia, pero los que estamos aqui debemos comenzar a crear nuestros nuevos circulos de influencia para evitar caer en el aislamiento. Empieza creando amistades en las escuelas donde vayas, en el trabajo, con los padres de los niños de la guarderia donde dejas a tus hijos, con tus vecinos. Socializa, obten telefonos, llamalos, organiza veladas, conozcanse, promueve salidas deportivas (como los partidos de futbol que tenias todos los domingos), participa en grupos culturales y comunidades en internet (como esta por ejemplo).
Esto te ayudara no solo a soportar los primeros años del proceso de integracion, sino que ademas te creara relaciones que pueden serte muy provechosas desde el punto de vista laboral y profesional.
Por razones obvias, el testimonio que mas llamo mi atencion fue el de la señora Anic Coiteux, residente de Repentigny y esposa de un compatriota mio, quien regreso a Quebec proveniente de Lima. Cuenta ella la gran diferencia que existe entre el modo de vida peruano (que creo es similar en la mayoria de los paises latinoamericanos) y el canadiense. En Lima ella fue testigo del papel que juega la familia en la vida social. A diferencia de los canadienses, nosotros somos mas calidos, no vivimos aislados, el circulo familiar es mas fuerte y el apoyo mayor aun. Comenta como anecdota que alla no se preguntaban que hacer con sus hijos cuando debian salir : "los llevabamos con nosotros", dice.
He aqui uno de los factores fundamentales del proceso de integracion. Los latinoamericanos venimos de nacer, crecer y desarrollarnos en una sociedad en donde la familia nos sostiene. Incluso despues de "dejar el nido", seguimos estrechamente relacionados a nuestra familia y no hablo solo de padre y madre, sino tambien tios, abuelos, primos, sobrinos y hasta la "familia de cariño" (amigos de larga data y que llegan a formar parte de la familia).
Cuando dejamos eso atras y llegamos a Canada nos damos con la sorpresa que el nucleo familiar esta compuesto por papa, mama y 1 hijo (el promedio canadiense). Por supuesto, existen abuelos, tios, primos pero no existe mucha cercania entre ellos. Cada uno esta ocupado de su propia familia. Ya no tenemos con quien dejar a nuestros hijos si debemos salir a algun lado, alguien de confianza y que no nos cobre :-). Es aun mas dificil en invierno, pues la gente hiberna.
Muchos inmigrantes toman esta diferencia de una manera tranquila, mientras que otros se sienten abatidos, se dejan arrastrar por el Sindrome del inmigrante y finalmente terminan regresando sin haberse dado una oportunidad de triunfar aqui.
Muy cierto es que nadie puede reemplazar a nuestra familia, pero los que estamos aqui debemos comenzar a crear nuestros nuevos circulos de influencia para evitar caer en el aislamiento. Empieza creando amistades en las escuelas donde vayas, en el trabajo, con los padres de los niños de la guarderia donde dejas a tus hijos, con tus vecinos. Socializa, obten telefonos, llamalos, organiza veladas, conozcanse, promueve salidas deportivas (como los partidos de futbol que tenias todos los domingos), participa en grupos culturales y comunidades en internet (como esta por ejemplo).
Esto te ayudara no solo a soportar los primeros años del proceso de integracion, sino que ademas te creara relaciones que pueden serte muy provechosas desde el punto de vista laboral y profesional.
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